SEM, o Search Engine Marketing (Marketing en Motores de Búsqueda), es otra estrategia clave en el ámbito del marketing digital. A diferencia del SEO, que se centra en obtener tráfico orgánico a través de estrategias no pagadas, el SEM implica el uso de publicidad pagada en los motores de búsqueda para aumentar la visibilidad de un sitio web.
La principal herramienta utilizada en SEM es la publicidad de pago por clic (PPC), que permite a los anunciantes colocar anuncios en los resultados de búsqueda de los motores como Google Ads (anteriormente conocido como Google AdWords) o Bing Ads. Estos anuncios suelen aparecer en la parte superior de los resultados de búsqueda o en un recuadro destacado, y están marcados como “anuncio” para diferenciarlos de los resultados orgánicos.
Las ventajas del SEM incluyen la capacidad de alcanzar rápidamente a un público objetivo específico, controlar el presupuesto y el retorno de la inversión (ROI) de manera más directa, así como la posibilidad de realizar pruebas y ajustes en tiempo real para optimizar el rendimiento de los anuncios.
En resumen, el SEM es una estrategia efectiva para aumentar la visibilidad y el tráfico de un sitio web a través de la publicidad pagada en los motores de búsqueda, complementando así las estrategias de SEO y ayudando a alcanzar objetivos de marketing específicos, como la generación de leads o la venta de productos y servicios.